Un 7 de julio de 2004 fallecía en Mérida, su patria chica adoptiva, el Dr. Pedro Rincón Gutiérrez, Rector Magnífico de la Universidad de Los Andes, dejando un legado material y espiritual que constituye soporte esencial para la pervivencia de nuestra Alma Mater.
Hoy, cuando la
misión de la Universidad venezolana es objeto de
profunda revisión y crítica, su figura y ejemplo se yerguen para señalarnos un
derrotero que pudiera conducirnos a puerto seguro. No podrían ni Mérida ni su
universidad dejar pasar inadvertida esta fecha, propicia para rememorar su
vida, su obra y su ejemplo. En consecuencia, con el presente esbozo biográfico
hemos querido, como universitarios y merideños, homenajear su memoria.
Oriundo del Distrito Maracaibo,
Municipio Santa Bárbara del Estado Zulia, Pedro Ángel de Jesús Rincón Gutiérrez
nació el día 27 de julio de 1923 en un hogar sencillo. Según reza su partida de
nacimiento su padre, Fermín Rincón, era agricultor y su madre, Bitalia María
Gutiérrez, se desempeñaba en los oficios del hogar.
Realizó sus estudios primarios en el
Colegio San José de Táriba, de los padres salesianos, y los secundarios en el
Colegio “San José”, regentado por los padres jesuitas de Mérida. Ingresó en la
Universidad de Los Andes el 31 de octubre de 1941 y se recibió de Doctor en
Ciencias Médicas en el año 1947. Ejerció su profesión como médico interno tanto
en la Maternidad “Mérida”, de la cual fue uno de sus fundadores, como en el
Hospital “Los Andes”. Fue además un connotado obstetra. Paralelamente fungió
como docente en la universidad, en cuya Facultad de Medicina ejerció las
cátedras de Patología General, Fisiopatología y Trabajos Prácticos de
Obstetricia.
En febrero de 1958, recién derrocado
el régimen de Marcos Pérez Jiménez, fue designado Rector de la Universidad de
Los Andes. En 1959 el Claustro Universitario lo reeligió para el lapso
1959-1962. En 1976 fue electo de nuevo, para el período 1976-1980 y en 1984
volvió a ocupar el cargo hasta 1988.
Hacer un recuento de la labor universitaria
de Pedro Rincón Gutiérrez requeriría de centenares de páginas, pues de muchas
maneras la modernización de nuestra máxima casa de estudios es obra suya.
También la ciudad, universitaria y turística, lleva la impronta indeleble de
sus iniciativas como Rector; baste señalar, a modo de ejemplo, su proyecto de
Ciudad Universitaria, aún inconcluso, o su preocupación por dotar a la ciudad
de un moderno hospital (HULA), para el cual aportó el terreno, o la
participación en la fundación de urbanizaciones, residencias estudiantiles,
complejos deportivos. Estas no fueron sus únicas realizaciones. Merecen
destacarse, en lo que tiene que ver con la universidad, las siguientes:
1. Creación de diferentes facultades,
escuelas, núcleos, institutos y centros de investigación: Facultades de:
Humanidades, Economía, Ciencias y Arquitectura. Escuelas de: Educación,
Geografía, Administración, Artes Plásticas, Música, Ingeniería Eléctrica y
Ciencias Políticas, además del Ciclo Básico. Núcleos Universitarios de Trujillo
y Táchira. Institutos de: Conservación de los Recursos Naturales,
Investigaciones Agropecuarias, Silvicultura, Fotogrametría, Medicina Nuclear.
Centros: Cardiovascular, de Investigaciones Odontológicas, de Investigaciones
Literarias, de Jurisprudencia y Centro Universitario de Enfermería, además del
Centro de Investigaciones para el Desarrollo Integral de Aguas y Tierras
(CIDIAT) y el Instituto Forestal Latinoamericano de Investigación y
Capacitación (IFLA-IC).
2. Creación de la Organización de
Bienestar Estudiantil (OBE), Proveeduría Central, Caja de Ahorro de los
Empleados, Instituto de Previsión Social de los Profesores, APULA,
Cuerpo de Bomberos Universitarios, Dirección de Finanzas, Dirección de
Mejoramiento Académico, Fondo de Jubilaciones, Consejo Jurídico Asesor, Consejo
de Publicaciones y Talleres Gráficos Universitarios.
3. Proyección de la Universidad de
Los Andes, como nunca antes, a escala nacional e internacional. Su influencia
en la región se hizo más decisiva y su aporte al proceso económico, político y
cultural del país fue cualitativa y cuantitativamente más importante.
4. Alto nivel académico logrado,
entre otras razones por la contratación de docentes provenientes de distintos
países latinoamericanos, estadounidenses y europeos.
El Doctor Gutiérrez, además de
Rector, fue Presidente del Colegio de Médicos de Mérida, miembro del Comité
Ejecutivo de la Federación Médica Venezolana, Ministro de Sanidad y
Diplomático. Participó en las lides políticas desde los años de la dictadura
perezjimenista, al lado de los sectores más progresistas y sin ningún tipo de
sectarismo. Su defensa de la autonomía universitaria fue constante, clara y sin
cortapisas. Quienes lo conocieron destacan su sencillez, su inclinación
humanística y su hondo sentido de la solidaridad. Falleció en Mérida el 7 de
julio de 2004.
Artículo de: Pedro María Molina Tomado
de: Archivo Histórico de la ULA. Aparece en Prensa ULA 7-7-2015.