EL INSIGNE SERVIDOR PUBLICO
Se graduó de bachiller en 1941 en el Colegio Jesuita San José. Los jesuitas habían regresado a Mérida luego de siglo y medio de haber sido expulsados del Imperio Español, y como consecuencia de la clausura del Colegio San Francisco Javier de Mérida, fundado en 1628. Este regreso de los jesuitas no contó con la anuencia de las autoridades eclesiásticas, mas bien fue un acuerdo entre el gobierno nacional y la Santa Sede, transmitido por el Nuncio Apostólico Monseñor Fernando Cento. Las autoridades eclesiásticas merideñas no eran partidarias de la instalación en la ciudad de congregaciones religiosas extranjeras.
I.- Durante
sus estudios de bachillerado, para cancelar las mensualidades del Colegio San
José, fue profesor de Biología. Se graduó de Médico Cirujano y optó al
Doctorado en Medicina. Trabajó en el Hospital Los Andes como interno residente,
y en la Maternidad Mérida, donde actuó como partero y Sub-director desde 1950
hasta 1958, siendo Director, el Dr. Antonio José Uzcátegui Burguera, de gran
influencia en la formación del Dr. Rincón Gutiérrez.
II.-
El 26 de enero de 1952, asumió la Vice Presidencia del Colegio de Médicos del
Estado Mérida, siendo Presidente el Dr. Mario Spinetti Berti. Desde 1953 hasta
1959, ejerció la Presidencia, acompañado sucesivamente por los Drs. Eloy Dávila
Celis y Abdel Fuenmayor.
En esta actuación gremial, se convocó una
Convención de Médicos Rurales por ser un estado de gran ruralidad, afectado por
enfermedades endémicas, falta de saneamiento y por desnutrición. Se eligió una Junta Directiva de la Sociedad
de Médicos Rurales integrada por los Drs. Danilo Asprino Curiel, Presidente;
Gonzalo Villamizar, Vicepresidente; Hugo Dávila, Secretario; Raúl Arellano,
Secretario; David Pérez Manzaneda; J. Kongraki y M Villar, Vocales.
En estas funciones, logró la publicación
periódica de la Revista del Colegio de Médicos. Colocó la primera piedra para
el edificio del Colegio de Médicos, el 17 de septiembre de 1953 con motivo de
la celebración en Mérida de la Octava Asamblea Anual de la Federación Médica Venezolana,
cuando fue electo su Vice presidente. En esta Asamblea se analizaron dos temas
relevantes:” Función Docente del Hospital. Necesidad de reglamentar el trabajo
médico en el Hospital” y “Nacionalización y Socialización de la Medicina”. Esta
Asamblea Médica fue clausurada por el Dr. Pedro Gutiérrez Alfaro, Ministro de
Sanidad y Asistencia Social.
Fue
ponente junto con el Dr. Hugo Murzi Matamoros de la ponencia “La asistencia
médica en el medio rural”, durante la XI Asamblea Anual de la FMV en La
Asunción, en 1956
Inició y terminó la construcción de la sede
del Colegio de Médicos con préstamos de la Universidad en 1958, a cambio de
alquileres de sus locales para sede inicial de la Facultad de Economía.
III.- Fue
miembro de la Junta del IV Centenario de la Fundación de Mérida junto con los
Drs. Eloy Dávila Celis, José Humberto Ocariz, José Rafael Febres y el Pbro.
Eccio Rojo Pardes. Los actos programados para esta solemne ocasión, el 8 de
octubre de 1958, debieron reorganizarse por defunción del Papa Pío XII.
IV.- En
1958, al iniciarse las protestas que dieron al traste con el régimen de Marcos
Pérez Jiménez, y que habían empezado en noviembre anterior principalmente desde
la Universidad y el Liceo Libertador, el Dr. Pedro Rincón Gutiérrez fue
designado, junto con los altos dirigentes políticos merideños Drs. Carlos
Febres Pobeda, Rigoberto Henríquez Vera y Omar Eladio Quintero, miembro de una
Junta Cívica que coordinara el proceso de protestas y otros
V.- A
mediados de 1958, después del derrocamiento de la dictadura, se señaló al
Teleférico de Mérida como una obra suntuaria, que debería ser desmantelada,
venderse como chatarra, y con los recursos que se obtuvieran, hacer caminos y
carreteras campesinas, viviendas y acueductos rurales u otros. El Teleférico
había sido una obra anhelada para el desarrollo turístico de Mérida, y para
esta fecha estaba muy adelantada su construcción. Con la finalidad de defender
la terminación de esta obra, se designó un Comité de Defensa del Teleférico
integrado por el Pbro. Eccio Rojo Paredes, director del Diario El Vigilante; Monseñor
Acacio Chacón, Arzobispo de la Arquidiócesis, Pedro Rincón Gutiérrez, Rector;
Rodolfo Santiago, Presidente del Centro Mérida de Caracas y periodistas caraqueños,
que lograron su cometido.
VI.- En
1958, al cambiar el régimen gubernamental venezolano hacia la democracia, uno
de sus efectos fue el cambio de las metodologías docentes en relación con la
disciplina, el silencio y el internamiento. El Colegio San José ofrecía un
internado muy reconocido a nivel nacional, y un externado para merideños. Empezó
a tener problemas con los estudiantes, en especial con su bajo rendimiento, por lo que, entre otras razones, decidió
cerrar sus puertas, y abrir rumores en 1959 sobre la venta del edificio del
Colegio.
Fuera de la actividad colegial, a nivel
nacional, la congregación Compañía de Jesús fundó la “Organización Javier”
dedicada a “desarrollar una escuela de dirigentes, a la asesoría laboral, una
Cooperativa Mixta y una Bolsa de Trabajo para empleadas domésticas y servicios
recreativos”. Esta Cooperativa se creó para servir de órgano financiero del “movimiento
social católico de Venezuela”.
“La
Cooperativa Mixta tenía una Sección de Ahorro y Préstamo para desarrollar el
ahorro y resolver problemas de crédito para obras sociales de tipo católico en sectores
populares”. “Esta Cooperativa tuvo problemas económicos que hizo que la Compañía
de Jesús asumiera compromisos contraídos”. Para ello, y por las circunstancias
antes mencionadas al principio, “se decidió vender el Colegio en 1960, lo que
creó un revuelo y un gran disgusto en la sociedad merideña”. El Ministerio de Educación, el comprador, “solicitó
el desalojo del Colegio, lo que motivó a que el Arzobispo Metropolitano de
Mérida pidiera al gobierno nacional una prórroga de esta decisión, apoyado por
la Asociación de Padres y Representantes. “El gobierno dio prórroga por un año,
luego del cual, debería pagar un canon de alquiler que agravaba la situación
económica”. “Con el dinero de la venta del Colegio al Banco Obrero, este
pagaría directamente a los ocho mil acreedores de la Cooperativa Javier”.
La arquidiócesis de Mérida creó la Fundación
San José, que construiría en esta ciudad, un colegio regentado por educadores
católicos. “En la Pedregoza, la Sociedad Anónima de Educación y Cultura Religiosa
que manejaba los asuntos económicos de los jesuitas, había comprado un terreno extenso,
que el arzobispo exigió que se le entregara.
La Congregación Jesuita lo hizo parcialmente, suponiendo que iba a ser
integrada a la Fundación San José”, lo que no sucedió. “La posesión de estos
terrenos creó un conflicto entre la Arquidiócesis y la Compañía de Jesús, que
tomó ribetes de gravedad, por lo que se designó una Comisión Conciliadora
integrada por obispos, el Secretario de la Curia, el Director de El Vigilante,
el Director del Colegio Monseñor Silva, el Gobernador del Estado, el Rector de
la universidad, Dr. Pedro Rincón Gutiérrez, el Presidente de la Cámara de Comercio,
CORPOANDES, el Director de la Sucursal Mérida del Banco de Fomento Regional los
Andes”.
Esta Comisión exigió “al Padre Rector del Colegio
San José, la entrega de la finca de la Pedregoza a la Fundación San José como
compensación a la donación hecha por una señora merideña de los terrenos donde
se construyó el Colegio San José, y que los jesuitas habían vendido al Gobierno
Nacional. El arzobispo, como retribución, y para que no se fueran de Mérida, les
ofreció el Seminario, lo que no aceptaron. En agosto de 1962, se entregó el Colegio
al Banco Obrero” (CCJ.1998)
VII.- Hasta
principios del siglo XX no había formalmente estudios de secundaria en Mérida.
Para subsanar esta situación, la Universidad creó un formato de estudios secundarios,
que formalizó en 1917 en el rectorado del Dr. Diego Carbonell con el establecimiento
del Liceo Mérida. A partir de 1932 y 1933, en el rectorado del Dr. Cristóbal
Benítez, este Liceo empezó a depender del llamado Ministerio de Instrucción Pública,
dividido en dos grandes áreas de conocimientos Ciencias y Filosofía y Letras,
funcionando en viejas casonas hasta cuando fue instalado en una magnífica sede
decretada por el Presidente Isaías Medina Angarita dentro de un plan nacional de
construcciones educacionales.
A partir de 1958, con el advenimiento de la
democracia y con el Ministro de Educación Rafafel Pizani, se lanzó el llamado
tríptico de la democracia: Educación, Salud y Trabajo. La Junta de Gobierno de entonces, para ampliar
las ofertas educacionales en especial para los trabajadores, decidió crear el
Liceo Nocturno Florencio Ramírez, adscrito a la Facultad de Humanidades recientemente
fundada, dirigida por el Dr. Carlos César Rodríguez. Este Liceo estuvo bajo responsabilidad
financiera de la Universidad en el rectorado del Dr. Pedro Rincón Gutiérrez.
Después de este cobijo inicial, en 1960 se trasladó a la sede del Liceo Libertador,
y fue asumida la responsabilidad total por el Ministerio de Educación.
VIII.- El
8 de diciembre de 1964, se creó la Corporación de Los Andes – CORPOANDES- como
un organismo de planificación regional. La Universidad de Los Andes en la
persona del Rector Dr. Pedro Rincón Gutiérrez aupó su promoción y luego
contribuyó al desarrollo de este importante medio de desarrollo regional. Su
creación fue estimulada por los Drs. Ramón Velásquez, Juan Galeazi, Antonio
José Uzcátegui, el rector Pedro Rincón Gutiérrez, Rodolfo Santiago Guerrero,
entre otros
Su
creación “obedeció al fomento del desarrollo humano sostenible en la región
andina a través de la coordinación, investigación, planificación, promoción de
planes, programas, proyectos y otras iniciativas, mediante la cooperación y la
concertación de los diversos actores sociales e instancias de gobierno, con una
institución comprometida, organizada, con recursos humanos altamente
calificados y respetuosos de la diversidad”.
Una organización de desarrollo regional que se
relacionaría con la ULA, institución
académica de vocación igualmente regional.
IX.- Después
del primer rectorado en 1972, fue electo concejal en el Distrito Libertador del
Estado Mérida, ya que para entonces todavía no se habían creado las Alcaldías
Municipales. En esa etapa, se hicieron programas para embellecer la ciudad,
entre otros, con la colocación del Monumento de los Conquistadores de la Sierra
Nevada en El Valle, que luego fue mudado a las orillas de las faldas del Chama,
mirando a la Sierra Nevada.
X.- Después
del segundo período rectoral, en 1980 fue electo Diputado al Congreso Nacional
en las listas del MAS. En esta gestión
parlamentaria estuvo manifestando su permanente preocupación por la crisis
financiera de las universidades, a cuyo efecto, con otros miembros de Congreso
Nacional, elaboraron la justificación y bases de una Ley Especial de
Financiamiento de la Educación, que no prosperó.
Llamó reiteradamente la atención sobre el desconocimiento
de las grandes diferencias entre los integrantes de la Educación Superior, “de
lo injusto entre la gran prosperidad de las naciones opulentas y los pueblos
explotados, y como aquellas se empeñan y se dedican a lograr privilegios, que aplastan
pueblos que luchan heroicamente por su independencia”.
Afirmaba que “no había factores que
favorecieran la necesaria armonía y convivencia entre los distintos componentes
de la comunidad universitaria, lo que provocaba frustración, con actores
juveniles marginados”.
Planteó “que no sólo los Consejos Universitarios
sino el propio Consejo de Nacional de Universidades debería sugerir al Ejecutivo
Nacional y a los órganos de seguridad policiales para conformar mecanismos de
coherencia, comprensión y justicia”. “Que las organizaciones políticas para que
los conglomerados estudiantiles y sus conflictos no se dirijan contra otros
grupos juveniles, y de esa manera, evitar el deterioro de las relaciones entre las
personas y las visiones del país”.
XI.- Se
relacionó amistosamente con los
Presidentes Raúl Leoni y Rafael Caldera, así como con sus Ministros de Obras
Públicas, Ingenieros Leopoldo Sucre Figarella y José Curiel Rodríguez con
quienes logró un gran apoyo en relación a presupuestos adicionales para la
adquisición de las haciendas que conformaron el gran patrimonio físico de la Universidad, así como el contrato de
expertos para los estudios iniciales del diseño y la organización de la universidad en núcleos dentro de la
ciudad así como para algunas
construcciones y donaciones En particular, el financiamiento del Banco Interamericano de Desarrollo para
el Núcleo Médico Biológico de La Hechicera.
XII.- Se
comentó sobre un ofrecimiento del presidente Rafael Caldera, en su primera
presidencia para ser Ministro de Educación.
El
Presidente Jaime Lusinchi lo designó
Miembro del Consejo Consultivo de la Presidencia de la República junto
con los Drs. Ramón J Velásquez, Julio Sosa Rodríguez, Pedro Pablo Aguilar,
Domingo Maza Zabala, Ruth de Krivoy, Melich Orsini, Pedro Palma.
Formó parte de una Comisión
de Reestructuración del Instituto Venezolano de los Seguros Sociales, que
implicaba su universalidad como prestador de servicios en
tres Subsistemas. Un Subsistema de Salud, uno de Pensiones y otro de Salud
Laboral.
Participó
como Miembro de la Comisión de Notables presidida por el Dr. Arturo Uslar
Pietri para redactar un Proyecto Educativo Nacional. Estuvieron en la Comisión,
Orlando Albornoz, Felipe Bezara, Antonio Luis Cárdenas, Germán Carrera Damas,
Senta Essefeld, Edmundo Chirinos, Arnoldo Gabaldón, Ignacio Iribarren, Iván
Olaizola, Enrique Pérez Olivares, Luis Beltrán Prieto Figueroa, y Pedro Rincón
Gutiérrez.
Integró
la Comitiva del presidente Jaime Lusinchi en viaje a Japón.
El 2 de marzo de 1988, recibió un homenaje nacional
en un hotel de Caracas a la que asistió importante representación de la vida
venezolana.
XIII.-
En 1989, fue Presidente de la Federación Médica Venezolana. En 1990, convocó la
XLV Reunión Ordinaria de la Asamblea de la Federación Médica Venezolana, donde
se analizó el Tema Oficial: “Atención Médica Integral en Venezuela. Enfasis en
la Atención Primaria. Importancia primordial de la Medicina Familiar”,
redactada por una Comisión integrada por los Drs. Pedro Iturbe, (Presidente
Honorario), Roberto Rondón Morales (Coordinador) y Carmen de Carpio, “(Secretaria).
Además, los Drs. María de Barone, María E Bustamente, Haydee Pacheco, Rosa de
Loriente, Héctor Sequera, Carlos Arteaga, Félix Gruber, Ronald Evans y Tirso
Silva.
XIV.-
En 1992, fue presidente de Fundación para la Atención Médico Estudiantil-
FAMES., que es un Instituto creado por Decreto 531 del 16 de agosto de 1989
para ofrecer una cobertura médica y gastos por enfermedades a la población
estudiantil de educación superior activa. Los beneficios de atención médica
gratuita, y reembolsos en ciudades donde no haya clínicas afiliadas
XV.- El
presidente Rafael Caldera en 1993, creó el Ministerio de Estado para la
Educación Superior, al que aspiró el Dr. Rincón Gutiérrez. No obstante, lo
responsabilizó al ex Rector de la Universidad Católica Andrés Bello, Dr. Guido
Arnal. Al renunciar, éste recomendó no continuarlo por lo difícil que era
manejar la complejidad de la educación superior desde un Ministerio de Estado
con solo una oficina, chofer y secretaria. El Dr. Pedro Rincón Gutiérrez,
posible sucesor, esperó
En 1994, el Presidente Dr. Rafael Caldera lo
designó Miembro del Consejo Nacional de Salud presidido por el Dr. Fernando
Rubén Coronil, e integrado por los Drs. Jacinto Convit, Hernán Méndez
Castellanos, y Raúl Martínez Vera, Secretario.
Al salir el Dr. Carlos Walter del Ministerio
de Sanidad y Asistencia Social en 1996, el Presidente de la República designó
Ministro encargado a Roberto Rondón Morales.
En noviembre de ese año, el Presidente Caldera me informó que había
decidido nombrar como Ministro de Sanidad y Asistencia Social al Dr. Rincón
Gutiérrez, a cuyo fin, me solicitó llamarlo a Mérida para informarle y
solicitarle su traslado a Caracas para su juramentación.
La actuación en el Ministerio, hasta marzo
de 1997, se llevó a cabo dentro de los cánones de estos cargos. Pero afrontó problemas de varias naturalezas
por las características y complejidad de este organismo, y en parte por
considerar el manejo de este Ministerio similar al de la Universidad, una
comunidad de intereses espirituales e intelectuales, y adoptar su conducción
como si tal fuera, siendo como son en la realidad, dos entidades públicas
distintas en casi todos sus componentes, medios y fines. El Ministro Rincón
Gutiérrez con su conciliación y tolerancia, intervino en un conflicto planteado
en la Academia Nacional de Medicina por el Académico José O´Dally Carbonell en
una querella contra el Dr. Jacinto Convit, miembro del Consejo Nacional de
Salud, asesor del Ministerio y amigo personal del Presidente de la República y
del Ministro, sobre la realidad de una vacuna contra la malaria que el Dr.
Convit manifestaba estar en su logro. Para este cometido, obtuvo la
intervención exitosa del Dr. José Vicente Scorza quien viajaba de Trujillo a
Puerto Ayacucho a tal fin, a veces por carretera.
La discusión
y aprobación de las Convenciones Colectivas de Trabajo se llevaban a cabo en cada
ministerio en particular y en Caracas, lo que traía muchas ventajas y
beneficios institucionales y personales para los dirigentes nacionales de profesionales,
técnicos y obreros. El Presidente Caldera, desde antes de llegar al Ministerio
el Dr. Rincón Gutiérrez tomó la decisión de homologar las contrataciones
colectivas de organismos públicos nacionales, por ser muy disímiles, y
concentró estas discusiones en la Procuraduría General de la República, a donde
debían concurrir representantes de esos organismos nacionales y de los gremios
profesionales y obreros, coordinado todo por funcionarios de la Procuraduría.
De otro lado, el proceso de descentralización
de los servicios médicos, sociales y ambientales del MSAS, que se logró en
trece gobernaciones de estado, incluyó el traspaso de la prestación de esos
servicios, pero también del personal, edificios, muebles y otros, quea partir
de ese momento, quedaban bajo responsabilidad de los gobiernos estadales. Obviamente,
las Convenciones de Trabajo se discutirían en los estados en los que se había sido firmado el contrato
inter gubernamental respectivo, autorizado por el Senado de la República, lo
que también fue de poco agrado de las Federaciones Nacionales, en este caso, de
los médicos.
Esto generó un desagrado en los miembros de la
Federación Médica Venezolana presidida por el Dr. Fernando Bianco, quien
llamaba “Tío” al Dr. Rincón por su cercanía y amistad a su padre, el Dr. Jesús
María Bianco. El Dr. Pedro Rincón Gutiérrez, en su buena fe y capacidad de
diálogo, y creyendo que podía cambiar las anteriores disposiciones por su persuasión y amistad con el Presidente
Caldera, convocó, contra nuestra opinión, a una Asamblea Nacional de la Federación
Médica en un hotel de Caracas donde prometió, a pesar de sugerencias en
contrario, hacer una sola contratación colectiva para todo el país en Caracas, dejando
de lado la responsabilidad de los gobernadores, y las disposiciones de la
Procuraduría dirigida por su gran amigo, Dr. Juan Nepomuceno Garrido.
Al no lograr cumplir esta promesa, los
Colegios Médicos y la propia Federación Médica declararon una huelga general,
dejando a salvo sólo las emergencias hospitalarias. Contra la opinión de dos
médicos cercanos en sus funciones, Roberto Rondón Morales, Vice Ministro y José Francisco, Director de Salud Pública
pero siguiendo recomendaciones de algunos consejeros, se dirigió a la Emergencia
de la Maternidad Concepción Palacios a atender partos, lo que fue considerado
como una gran ofensa. Aumentaron los alcances de la huelga, la violencia
verbal, se retiraron de las emergencias hospitalarias, acto no visto antes, y decidieron
no emitir los informes epidemiológicos, también por primera vez; esto es, una
parálisis total. En general, fue una gran incomprensión y maltrato hacia un
amigo de los médicos, ex Vice Presidente y ex Presidente de su Federación. Particularmente, en Mérida hubo una desconsideración
desatada de manera inmerecida. No pudo entender y aceptar que la mecánica de
las Convenciones Colectivas de Trabajo, por razones legales, dependían de un proceso político que no manejaba ni
siguiera el Presidente de la República.
XVI.- Al
mismo tiempo, fue sustituido el Embajador de Venezuela en Perú por una conducta
que se consideró inapropiada por el gobierno nacional, cuando junto con otros
embajadores fueron secuestrados por Sendero Luminoso en la Embajada de Japón en
Lima.
No obstante, este ofrecimiento inicial, el
Dr. Pedro Rincón Gutiérrez fue designado Embajador Plenipotenciario en Rumania,
donde ejerció estas funciones hasta su regreso definitivo a Mérida.
A cien años de su nacimiento, su servicio
público, al igual que el universitario, resaltan de una manera particular y
sobresaliente.
Roberto Rondón Morales.
MIRADAS MULTIPLES. Abril de 2023